Si tuviera que definir lo que significó en un primer momento diría que fue sanar, reencontrarme, volver a ser yo, revalorizando y renovando los vínculos de mi vida. Luego, al finalizar el proceso, comenzó la vida "afuera" y como dice el dicho "en la cancha se ven los pingos" y verdaderamente me veo bien; porque las circunstancias de mi vida han puesto a prueba mi entrenamiento y siento que estoy saliendo airosa; claro que la evolución no termina, pero si no hubiera hecho el entrenamiento no hubiera podido afrontar de pie lo que el 2017 me deparaba. Por lo tanto tendría que decir que la experiencia de evolucionar significó para mi, la posibilidad de encontrarme hoy de pie y acompañada por un gran equipo que respalda con amor. Seguimos cada día diciendo "gracias universo por esta nueva oportunidad".

Evolucionar significó sobre todas las cosas, conocerme, de una forma que jamás me había conocido. Encontrarme conmigo misma, caminar, animarme a explorar, a sentir, permitirme el error pero sin dejarme caer. Fue crecimiento. Fue mirarme, perdonarme, sanarme y empezar a merecerme..a mi misma. De las experiencias más maravillosas que viví. Lo lindo de evolucionar es que no termina, porque evolucionar es la vida.

Es un antes y después. Realmente me cambió la vida. Cada herramienta la aplico constantemente y los resultados en su mayoría son los que quiero. Encontré la forma de vivir como quiero y no como puedo. Me reconocí y cada día es un estiramiento en mi vida. Encontré amigos que elijo cada día. Doy gracias al Universo y a todos los que conforman Evolucionar eternamente. Logré tener a mi hermana de este lado y espero y trabajo para que todas las personas que amo, tambén vivan la experiencia. Recuperé a mi hermana y amiga, y hoy vivimos una relación sana y real, compartimos nuestra vida como nos merecemos y enfrentamos juntos nuestra historia de vida. Ya no estoy, ni me siento solo, por el contrario, tego un equipo y una vida que quiero, merezco y amo.

Fue una experiencia maravilosa que me transformó. Me ayudó a volver a sonreir y a poder ser yo, sin importarme la mirada del otro. Me empecé a dar valor y a reconocerme. Pude perdonar y perdonarme. Conocí un equipo de gente maravillosa,que caminó a mi lado en todo el proceso y que hoy elijo como mi familia del corazón. Tengo la posibilidad de ser parte del proceso de transformación de otras personas, lo que me llena de amor y me reconforta el alma. ¡Gracias Evolucionar!

La experiencia de Evolucionar no sólo me abrió los ojos para hacerme ver que venía viviendo la vida que podía, sino que me dió las herramientas para vivir la vida que quiero. También me enseñó a ir por mis sueños y hoy puedo decir que, día a día, me levanto siendo un hombre responsable seguro y comprometido.